En la economía del siglo XXI, los activos más valiosos de una organización ya no se miden en metros cuadrados, maquinaria o existencias en bodega. El informe Global Intangible Finance Tracker (GIFT) 2025 confirma una transformación radical: el valor de los activos intangibles —donde el branding es protagonista— creció un 23% este año, consolidando su liderazgo en la economía mundial.
Hoy, para empresas del S&P 500, la marca representa más del 40% del valor total de la compañía, frente a solo el 10% que representaba hace 30 años. Si tu estrategia sigue centrada únicamente en el inventario físico, estás ignorando el motor más potente de rentabilidad y defensa financiera de tu negocio.
La Marca como Refugio contra la Inflación
Uno de los mayores retos empresariales en Colombia para 2025 es la presión inflacionaria. En este contexto, el branding actúa como un “escudo financiero”. Las marcas más valiosas del mundo, como Apple o Amazon, han demostrado que una identidad poderosa permite aplicar precios premium y sobrevivir a aumentos de costos sin erosionar la demanda.
En el mercado local, casos como el de Bavaria muestran que sus “mega marcas” (Águila, Poker, Club Colombia) representan cerca del 70% del valor total de su portafolio en el país. Asimismo, startups colombianas como Rappi ya alcanzan valoraciones de marca superiores a los US$500 millones, demostrando que la confianza y el ecosistema visual son activos transables y monetizables.
¿Cómo se mide “lo invisible”? Las normas ISO
Para que el branding sea reconocido en un balance financiero, la subjetividad ha dado paso a estándares internacionales. Existen dos marcos técnicos clave que todo gerente debe conocer en 2025:
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ISO 10668 (Valoración Monetaria): Establece las reglas para determinar el valor económico real de una marca, integrando el análisis financiero, de marketing y legal.
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ISO 20671 (Evaluación de Marca): Se enfoca en la gestión y medición del desempeño (Brand Equity), proporcionando una base para identificar áreas de inversión que aumenten el valor del negocio a largo plazo.
Invertir en estos estándares permite a las empresas modernas utilizar su marca como garantía para financiación o como un factor determinante en procesos de fusión y adquisición.
Inversión Inteligente: El cambio de paradigma
Mientras que la inversión en activos tangibles creció apenas un 1% entre 2023 y 2024, la inversión en intangibles se disparó un 3%. Las empresas líderes están moviendo su capital hacia la construcción de relaciones de confianza, reputación y cultura visual, porque entienden que un inventario puede quedar obsoleto, pero una marca relevante es un activo que genera retornos constantes.
Conclusión: El diseño es estrategia financiera
El diseño gráfico y estratégico no es “decoración”. Es la arquitectura de un activo financiero que protege tus márgenes, atrae talento y asegura la lealtad del cliente en tiempos de incertidumbre.
En QÜID Design, no solo creamos identidades visuales; construimos activos intangibles diseñados para incrementar el valor de mercado de tu empresa. Es hora de dejar de ver tu marca como un dibujo y empezar a verla como la inversión más rentable de tu balance.